Dos manos y una boca
Dos manos y una boca
rozaban mi piel
sin tan sólo quererlo.
Ellas no lo sabían
pero mi cuerpo ya se había embriagado de su sonido y su luz
cuando las primeras palabras salieron de sus labios.
Mis manos sueñan con su boca
cuando mi boca desea ser tocada por las suyas,
y es que bocas y manos tienen tanto que decir
que el tiempo es nada cuando las horas son risas y miradas.
Pero no siempre dos bocas y cuatro manos se desnudan cuando uno quiere,
y es posible que esta vez
todo se quede en ese deseo que habita entre dos cuerpos
pero una sola boca.
pues claro que puedes socio, todo un honor para mí.
ResponderEliminarte dejo este poema de oscar aguado aqui pegado, porque me lo ha recordado este tuyo:
Apréndete esto de memoria
dos más tres son tus piernas y las mías
si restas una es porque te estoy amando
si vuelves a sumar esa una
es porque llena de mí te apartas
y somos cinco
con tus brazos siete
con los míos nueve
si te abrazo y me abrazas
ya somos cinco
si tus piernas se me enredan
y las mías sin azar se te enredan
somos uno
te amo
ahora somos cero
el principio de todo nosotros.